Va pasando la primavera y aún no ha caído una sola gota. El Obispo del barrio tiene la feliz ocurrencia de convocar a todos a un ayuno especial para pedir la lluvia. Están todos reunidos en la Capilla y el Obispo, compungido, no puede por menos que lamentarse:
-¡Ah, hombres de poca fe! Estamos reunidos para rogar que llueva y ninguno de ustedes ha traído el paraguas.
Tenemos muchos chistes mormones para ti
hola yo soy maria sarmiento........ quisiera saber para que esta pagina.?¿
ResponderEliminarMás de 2.400 personas y yo creemos que es una página para mormones con sentido del humor.
ResponderEliminarNo recomendable para personas graves, de cara larga, que les gusta andar serios por la vida.
Sólo pretende sacar una sonrisa y alegrar el día.